Te Invito A Un Cafe
Te invito a un café. Claro que sí. Te invito a que podamos conversar, adentrarnos a nuestro ser para reconocer esos espacios que posiblemente hasta hoy no haz descubierto pero que son tan necesarios de recorrer. Para que en el camino descubramos un nuevo sabor por la vida. Esa esencia de ese café especial que solo se puede degustar cuando nos permitimos sanar nuestras heridas y reconciliarnos con nuestro ser. Yo tú, acepto la invitación.
Reconcíliate contigo, con tu ser, con tu historia, con tu cuerpo. Esto te permitirá transitar por la vida en plenitud.